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Visitantes del Verano (3)
Fecha: 19/09/2017, Categorías: Sexo Duro Sexo con Maduras Tabú Autor: deniadaniya10, Fuente: xHamster
Cuando mi tía Evita fue a casa de su visita, la echaba de menos. Yo todavía estaba en mi casa con mi madre. Yo había terminado mi segundo año de universidad. Yo tenía veinte años, y yo siempre quería sexo. Evita realmente me había dado algo para soñar. Me gustaría pensar en ella mientras me masturbaba mi erección en mi dormitorio. Me puse a pensar más y más de mi madre mientras dormía abajo en el dormitorio principal. Es difícil decir lo que podría haber sucedido si mi tía María no había decidido venir a visitarnos, también. Esta era la ciudad natal de mi familia. Mis abuelos vivían al otro lado de la ciudad. No era raro que todas las chicas, tía Evita, tía Marita, y la hija de Evita, Sarita, a venir para las visitas. Sobre todo porque los viejos ya no podían viajar. Mi abuelo había sido cada vez más senil. Así que la abuela tenía que quedarse en casa con él todo el tiempo. Pero las mujeres todos los visitaban con frecuencia. Mi madre se acercó al menos una vez a la semana. Yo también. De todos modos, era más fácil para los visitantes a permanecer en nuestra casa para no ser una carga para mi abuela. Y mi tía Marita ahora había puesto en su apariencia. Iba a pasar unos días en la misma habitación que la tía Evita había utilizado sólo un par de semanas antes. Tía Marita tenía los pechos pequeños que todas las damas de la familia tenían. Tenía el pelo largo y castaño oscuro. Todas las mujeres tenían el pelo largo y castaño, a sólo matices diferentes. Marita fue un ...
académico. Ella era un profesor asociado en un colegio para mujeres. Toda la familia pensaba que ella era lesbiana. Ella nunca se había casado. Ella compartió su casa con varias mujeres en los últimos años. Ella siempre había dicho que era para mantener bajos los gastos ya que ella no hizo mucho en un pequeño colegio, pero todos sabíamos que ella le gustaban las mujeres. Realmente creíamos que, pero nunca hablamos de eso con ella. Además, creo que su personalidad le hizo naturalmente reticentes acerca de cosas personales. Llegó una tarde, mientras mi madre estaba todavía en el trabajo. La saludé en la puerta con un abrazo. Yo amaba a mi familia. Éramos una familia muy unida. Marita me abrazó de nuevo y de inmediato, después de haber tomado sus cosas a su habitación, comenzó a interrogarme acerca de cómo estaba en la escuela, lo que las clases que me gustaba, si necesitaba ayuda y así sucesivamente. Un verdadero maestro de cabo a rabo. Entonces ella comenzó a seguir sobre mi vida amorosa. Le hablé de mi novia que vivía a cientos de kilómetros de distancia y se compadeció de mí. "Estoy seguro de que desea verla. Yo conozco bien a los jóvenes. Yo les he enseñado todo de mi vida. Tú la estás perdiendo tanto mental como físicamente. Soy consciente de las necesidades de ustedes, los jóvenes tienen. ¿Cómo manejas la falta de contacto físico cercano Eduardo? Sé que a tu edad debe ser sexualmente activos. También sé ma ojos lo suficientemente inteligentes para ser el uso de técnicas de sexo ...