Anita usada en casa otra vez
Fecha: 12/02/2018,
Categorías:
Sexo con Maduras
Tabú
Voyerismo
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
Anita usada en casa otra vezUnos días después de la salida de Anita a solas con Ricardo me encontraba en mi trabajo, cuando el muy hijo de puta me llamó al celular, diciéndome que en ese preciso momento estaba gozando de mi esposa en nuestra casa y que me apurara a regresar si quería presenciar el espectáculo de una buena cogida.No le creí nada y esta vez lo insulté, ya que mi calentura pasaba precisamente por estar presente mientras alguien se cogía a Ana.De todas maneras me apresuré en llegar a casa, comprobando que realmente decía la verdad.El mecánico estaba sentado en una silla del comedor, fumando uno de mis habanos favoritos, con los pantalones bajos y sus grandes manos sosteniendo a Anita por la cintura.Tenía a mi esposa sentada a horcajadas sobre su vientre y la hacía subir y bajar sobre su endurecida verga, la cual se perdía hasta el fondo dentro de sus enrojecidos labios vaginales.Ana estaba vestida solamente con una musculosa negra transparente, la espalda arqueada hacia atrás, los ojos cerrados, iniciando un agudo y prolongado aullido de placer, señal inequívoca de que llegaba al orgasmo en ese preciso instante.Ricardo también gritó fuerte y se contrajo, afirmando el cuerpo de mi esposa contra el suyo, mientras acababa y descargaba todo su semen dentro de ella.Cuando se relajaron un poco, recién notaron mi presencia. Ana se puso colorada y me pidió perdón, desmontando esa endurecida verga mientras salía corriendo hacia el baño.El hijo de puta de mi amigo me miró ...
... con esa estúpida sonrisa socarrona.“Ojalá me disculpes Flaco, esta vez no tuve paciencia para esperarte…”Volví a insultarlo, recordándole que yo debía estar siempre presente.Anita salió del baño, usando ahora unas sandalias de taco aguja que hacían resaltar sus hermosas piernas, vestida solamente con la misma camiseta negra casi transparente, que dejaba ver los pezones erectos de sus espectaculares tetas. La visión de su sensual cuerpo me despertó una fuerte y dolorosa erección, que me fue difícil de ocultar.Ella enseguida lo notó, se acercó a mí contoneándose felinamente y se colgó de mi cuello, mordiéndome los labios en un beso de lengua bien profundo. Luego me miró a los ojos provocativamente y se inclinó doblando la cintura, desabrochando mis pantalones y liberando mi dolorida verga, que enseguida saltó al encuentro de su boca.Comenzó a chupármela de una manera increíble, nunca la había sentido así, tan sensual.Ricardo mientras seguía sentado y fumaba el habano, dibujándose en su rostro esa eterna estúpida sonrisa.Entonces se levantó acercándose a Anita, cuya posición inclinada le ofrecía una maravillosa vista de su hermosa y firme cola. Muy despacio fue enterrando otra vez su rígida pija entre los labios vaginales de mi mujercita, que gimió con un gesto de sorpresa ante esta invasión inesperada.Estuvo bombeándola durante un buen rato, mientras Ana me hacía acabar en su boca, tragándose toda mi leche sin derramar una gota. Luego me abrazó por la cintura mientras el hijo ...