LA AVENTURA COMENZO MUY TEMPRANO PARA ELLA
Fecha: 23/01/2018,
Categorías:
Lesbianas
Autor: isabela, Fuente: RelatosEróticos
La aventura comenzó para ella muy temprano en la mañana. Salto de la cama porque ya se le hacía hora de ir a tomar el bus que la conduciría directo al instituto, una vez de pie, estiró los brazos hacia arriba y así terminó de desperezarse. Lo primero que agarro de la ropa que había preparado noche antes y que se iba a poner hoy era su tanga rosa, la acaricio del centro dando vuelta la prenda, las yemas de sus dedos pasaban suaves por donde estaba escrito aquel nombre en la tela, sus caricias eran muy afectuosas, al instante acercando la prenda a su rostro la acaricio con su mejilla. Se sentía muy reconfortada pasando el interior de su tanga por una de sus mejillas, podía sentir la suavidad de la tela; se acariciaba con aquella parte que tenía inscrito aquel nombre, y tras haberse mimado las mejillas con aquella parte de la prenda íntima, sintió la intensidad que ese nombre le producía. De pronto sintió una avalancha de excitación que la dejó quieta, todo su cuerpo era invadido por un exquisito placer, sentía un hormigueo en su vagina que hacía que su clítoris tomara cuerpo entre sus pieles vaginales, y sus pezones se ajustaran contra su pijama dejando sus senos muy abultados. De inmediato se fue a la ducha, no se aguantó y mientras se duchada se hizo la primera masturbación, su clítoris era el centro de atención de sus manos que pasaban enjabonando su vagina y que junto al jabón y el agua tibia le proporcionaban una masturbación muy satisfactoria. Salió de la ducha, seco su ...
... cuerpo, se miró desnuda como siempre le gustaba mirarse, se tomó unas fotos de cuerpo entero frente al espejo, volteo a ver sus nalgas, las veía en el espejo, sabía que esa zona de su cuerpo le gustaba a aquella que tenía su nombre escrito en su tanga rosa, entonces se tomó unas fotos más de sus nalgas, luego las envió todas por correo a la que tanta excitación le causaba y así comenzó otro martes excitante. Termino de vestirse apresurada, desayuno una rosquilla con jugo de naranja mientras se peinaba y salió a toda prisa de casa, no sin antes tomar su bolso y su teléfono móvil. En el bus recordó la actividad que tenía planificada para hoy en su club y se sintió muy excitada, repaso mentalmente como iba a realizar dicha actividad y ya sentía el centro de su tanga muy húmeda, dentro de sí misma se preguntaba cómo estaba quedando ahí al centro el nombre que tenía grabado en la tela. Eso la excitaba más, en su asiento movía las piernas algo nerviosa, sentía que sus leggings se pegaban al asiento, pero con todo y eso se sonreía, porque solo ella entendía la complicidad del momento, el misterio de llevar unas bragas rosa con un nombre escrito en la parte que va a dar a su vagina y pertenecer a un club de chicas que en secreto pasaban los martes más excitantes de sus vidas. Una vez en el instituto, se reunió con sus amigas en el pasillo para charlar mientras esperaban a que empezaran las clases, mientras estaba ahí parada con su grupo de amigas, bajaba la mirada disimuladamente para ...