1. Nieves es asi de puta


    Fecha: 28/12/2017, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Mi madre y yo vivimos solos en una casa del centro de Valencia desde que mi padre nos abandonó hace unos 10 años, cuando yo tenia 11 años y mi madre contaba con 31. Por la falta de una figura paterna mi madre tubo q hacer de madre y de padre durante la complicada etapa de la adolescencia lo cual hizo que fuera naciendo entre nosotros una estrecha relación de complicidad. Actualmente yo cuento con 21 años y la relación con mi madre no ha hecho mas que mejorar, sin embrago yo siempre he sabido que no es del todo sincera conmigo, que me oculta algo, ya que dudo que su trabajo de secretaria nos de para tantos lujos ya que siempre me hace regalos caros y vivimos por todo lo alto. Llegue a pensar que estaba metida en algún asunto turbio como pueden ser las drogas o algún negocio sucio. Desde que nos dejo mi padre yo no le conocía pareja alguna, por eso un día que la vi con un señor me extrañe mucho y decidí seguirlos. Digo que me extrañe y a la vez me enfade ya que mi madre nunca me había hablado de esta relación. Mientras los iba siguiendo me iba calmando y pensaba que era normal que ella rehiciera su vida y que de todos modos yo tampoco le comentaba a ella con quien iba o dejaba de ir. Mi madre es una mujer normal de mediana estatura y un cuerpo conforme a su edad (41 años), aunque del resaltan unas tremendas tetas de 110 que debo reconocer que ponen cachondo a cualquier hombre y que en mas de una ocasión me he hecho una buena paja pensando en ellas. De repente vi como mi madre ...
    ... y el hombre que la acompañaba subían a un coche y desaparecían. Yo mientras, decidí volver a casa entre pensativo y enfadado, intentando buscar la mejor manera de comentarle a mi madre lo sucedido. Como de costumbre ella llegó a eso de las 8 de la tarde, me dio un beso y me dijo que se iba a duchar. Sin saber como la seguí despacio y me dispuse a espiarla, como cuando era mas joven, ya que ya hacia mucho tiempo que no veía esas tetas y deseaba con todas mis fuerzas pajearme mientras se las miraba. Espere a que saliera de su cuarto y me cruce con ella por "casualidad" aunque no puede ver nada ya que llevaba una toalla envuelta en el cuerpo. La excitación iba en aumento. Entonces fue cuando me dirigí al cuarto de baño esperando que la puerta estuviera entreabierta; esta vez tuve suerte y la puerta no estaba cerrada del todo aunque el ángulo de visión no me dejaba ver la ducha pero si que podría verla mientras se secaba a través de un espejo. Cuando ella entró en la ducha yo me saque la polla y me empecé a pajear con muchas ganas, esperando a que saliera a secarse. Al fin escuché detenerse el corro de agua y escuché salir a mi madre. Al ver ese espectáculo note que ya me corría cuando algo me dejo alucinado: en uno de los pezones de mi madre pude ver un piercing!!. la escena me puso tan cachondo que eyacule allí mismo como nunca y me fui a mi cuarto sin poder quitarme de la cabeza las tetas de mi madre. Llego la hora de la cena y yo estaba muy nervioso mi madre lo notó y me dijo ...
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