AHORA SON DOS VIII - Relatos Eróticos

AHORA SON DOS VIII

... primero fue Antonio, me penetró delicioso de un solo empujón lo metió ya que mi culito estaba súper dilatado después de la doble penetración, con una mano haló mi cabello hacia atrás y con la otra me tomo por el abdomen para una penetración más profunda me bombeaba como loco, la sacaba toda y volvía a meterla duro como a mí me gusta que me cojan, con pasión, besaba mi espalda, me daba nalgadas, yo no podía más estaba a punto de estallar, mientras Chuy con su verga acariciaba mi cara y acomodándose frente a mi comenzó a hacerse la rusa entre mis tetas, era delicioso ese momento, de repente Toño empezó a bombear más fuerte y lo oía casi gritar era evidente que estaba cerca de un orgasmo y así fue, sentí toda su leche en mi agujero y luego escurrir por mis piernas, estaba súper caliente esa leche deliciosa que me entregaba, se retiró de mi culo y siguió Chuy quien aprovecho la dilatación de mi culo para meterlo de una sola embestida ahhhhhhhhhhhhhhhh me dolió muchísimo, pues tenía la verga súper hinchada ...

... de excitación, me tomó por las tetas y me comenzó a bombear me sobaba las tetas y me penetraba delicioso, luego me tomó por los hombros y me la hundía toda, sentía que me partía las entrañas, pero lo sentía delicioso, ayyyyyyyyyyy dámela papito dámela toda que rico, lléname el culo de tu leche, rico papi, dame dame, Antonio descansaba mientras veía como nuestro hermano me cogia , y de repente Chuy lo saca, lo oigo gritar y me echa su leche en la espalda y nalgas ahhhhhhhhhhhhhhhhh ahhhhhhhhhhhhhhhhhh me dio una fuerte nalgada y me dice gracias putita nos has hecho gozar como ninguna, quedé bañada de su leche deliciosa, descansamos un poco ahí tendidos en el pasto bajo la luz de la luna y las estrellas, al rato nos levantamos, nos vestimos rápido ya que hacia un poco de frio, así que nos metimos al carro, nos tomamos otras cervezas y nos dio el amanecer ahí entre el carro los tres, yo en medio y ellos abrazándome, dormidos cansados pero satisfechos de tanto sexo, cuando despertamos, nos fuimos a casa.