1. Traviesa


    Fecha: 13/02/2021, Categorías: Fantasías Eróticas Tus Relatos Autor: Analí, Fuente: computo.ru

    Me llamo Analí. Estaba de viaje con una amiga, de compras. Ambas coincidimos en que seria una experiencia interesante hacer una travesura, es decir, ser bien "perras" con algún rico macho que apareciera. Me excitaba que otro hombre que no fuese mi esposo me disfrutara y me hiciera sentir su hembra. Lo conocí en el bar del hotel, en ese tiempo yo tenia 32, estaba tierna, jaja. Él más de 40. Note que me miraba...hasta que se acerco. Intuí que sabía lo que yo quería. Tomamos una copa y sugirió ir a su habitación. Me pregunto si me excitaba la fantasía de estar atada. Me dijo que a muchas mujeres les exita esa fantasía y me propuso hacerla. Yo estaba con varias copas en mí, y muy erótica y sexual. De pronto, estaba atada en esa cama suya, con los brazos extendidos hacia atrás...indefensa y extasiada. Poco tiempo paso para ya estar desnuda y no poder rehusarme a sus deseos traviesos. Cuando sentí su boca recorriendo poco a poco cada parte de mi cuerpo entendí lo fascinante de la experiencia. Me sentía tan mujer, devorada por un macho hambriento de mí, que no dejaba de decirme que yo era "su hembra" y que me entregara a la experiencia de que él era mi macho y tenia el control. Y bueno, al estar atada claro que lo tenia. Mis piernas reposaban sobre sus hombros entonces, cuando de pronto dijo: te daré tu primer orgasmo...a la vez que su boca fue directamente a mi cuello saboreandolo todo, de un lado a otro...haciendo que yo sólo colaborara para eso... entregandome al ritmo ...
     que llevaba. Fue allí cuando sentí esa "sensación o algo así" que muchas mujeres tal vez sintamos o fantasiemos, en el sentido de que estar atada, sentirse indefensa, disfrutando mi sexualidad, sintiéndome deseada, era algo realmente increíble...y que no tenía la menor intención de oponer alguna resistencia, sino todo lo contrario como me dijo él: sólo experimentar en ese momento. Ya llevaba 3 orgasmos y mi excitación era permanente. El escucharlo decir que yo "era su hembra" y que él  "mi macho" me excitaba mucho. Me sorprendía constantemente: de pronto en mi cuello, o en mis pechos...y mucho tiempo cogido de mis piernas. Me daba cuenta que disfrutaba de mi, mas que nada al escucharme gemir...cuando me entregue totalmente a la experiencia. Fue como que el esperaba con paciencia que yo me rindiese...Confieso que era una experiencia divina, sentirme indefensa al estar atada, pero sin experimentar ninguna agresión o maltrato...sólo la fantasía como mujer de "ser violada sin serlo". Y es verdad, a muchas nos excita esa locura nuestra. Llegado un momento, recuerdo estar mirándolo a los ojos mientras lo sentía dentro de mí, y creo que entendió (y era su propósito) que ya había llegado a ese momento en donde (y en realidad así fue) me sentía una "perra o puta" en esa cama. No malinterpreten, jaja. Esto sólo quiere decir lo que una mujer puede sentir o experimentar en su ámbito sexual. Ningún hombre entenderá lo que digo, muchas de nosotras...tal vez si. En buena hora! Chau! 
«1»