Con intuición
Fecha: 18/12/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
"Con intución"Lo esperaba enfundada en mi calzoncito rojo de encajes. Mis nalgas estaban firmes y apretadas, mi cuerpo tibio, allá abajo la excitación iba en aumento mientras oteaba entre las gentes buscando divisarlo. Había optado por una esquina concurrida y ya estaba media arrepentida de haber venido sin sostén. Pero si me mantenía quieta nadie lo notaría... él me había mandado un mensaje sospechoso, quería que nos encontráramos en la tarde, pero no especificaba el motivo. Yo tenía una vaga idea de lo que podría ser, sin embargo preferí no mencionarlo ¡es que me encantan las sorpresas! (aunque mi lengua estaba seca y el corazón palpitaba a mil por hora) De pronto divise su andar coquetón, igual lucía cansado, jajaja mas yo tenia muy claro que su fuego, una vez encendido, podía durar horas, felices horas de pasión.Sin resistirme apuré el paso y finalmente hasta corrí unos metros para llegar más rápido a sus brazos. Noté como sus ojos se posaban en mis pezones parados y mis tetas bamboleándose.Me besó, su lengua húmeda recorrió mi boca por dentro y la sequedad se acabó para nunca volver. De puro gozo algunas traviesas gotitas se asomaron por esos labios...los de la vagina.Me tomó de la mano con dulzura, pero apretando con decisión. Ambos teníamos las palmas húmedas, y yo tenia el sístole y diástole bailando alguna especie de cumbia jijiji .... anticipando, quizas, un mambo horizontal Vitrineamos un poco, me invitó a comer lo que quisiera pero en mi mente no había sabor a ...
... chocolate. Yo lo quería probar a él, con todo el sudor acumulado de su día de trabajo. Le miré sugestivamente el marruecos, pude percibir como se le abultaba cierta zona del pantalón. Parecía algo avergonzado, pero definitivamente contento por mis repetidos pestañeos e intentos de hacer maldades. Finalmente dejó el control de lado, liberó mi diestra y con ella de agarré de sopetón un cachete en plena calle. Se sonrió y me apretó la cintura con fuerza.Ahí me envalentoné, casi llegando a un negocio de cosas electrónicas en el que la gente se agolpaba a ver novedades, le puse toda mi palma cubriendo su pene semi erecto sobre el cierre.Sentí como se estremecía ¡que sensación!En un rincón más oscuro se puso romántico, me besó la frente, el cuello, las mejillas, la nariz, y cuando sus labios y los míos se juntaron aprovechó de poner su mano en mis pechos, que ya estaban brincando por atención. Mi clítoris hizo un gorgorito de entusiasmo. Caminamos poco rato más.Anochecía. Entramos a un motel con el rostro sonriente de los amantes.En las escaleras de nuevo le tome la parte delantera, pero esta vez no solté de inmediato, sino que trate de llevarlo como uno guía a una mascota y me siguió el juego gruñendo como perrito.Dentro de la habitación había espejos delante de la cama y en el techo, ideales para cumplir sus fantasías y las mías, en alguna ocasión.Pasamos a lavarnos algunas partes de nuestra anatomía siempre observándonos codiciosamente. Su pene goteaba agua y yo se lo "secaba" con ...