Amalia y los montadores
Fecha: 15/12/2017,
Categorías:
Infidelidad
Autor: murgis, Fuente: CuentoRelatos
... ese sí que vamos a disfrutar verdad Carlitos. Carlitos como ella le decía estaba ya con su polla bien tiesa y que nada le tenía que envidiar a la de Pepe, le indico mi mujer que se pusiera delante que se la iba a comer enterita, y así lo hizo, pero el pobre de ver a Pepe detrás dándole fuerte a mi mujer no tardo en correrse en la boca de ella, la cual al sentir la leche caliente del muchacho y Pepe que estaba ya a punto de correrse, se corrieron los tres a la vez, Dice mi mujer que tanto el Carlitos como Pepe eran una manguera echando leche, sobre todo Pepe que se paró dentro del coño de mi mujer y no paraba de echar unos chorros de leche que le quemaban la matriz a mi mujer, menos mal que ya no se puede quedar embarazada si no ese hubiera dejado preñada a mi mujer seguro según me decía ella. Mi mujer quedo hecha un trapito, les dijo que ya era hora de medir la cocina, que ahora se iría a la ducha, para quitarse las 3 lechadas que tenía en lo arto 2 en su coño y otra en su boca, que después continuaría con Carlitos, que no se iba a ir sin su ración. Ellos se pusieron a medir y mi mujer a la ducha, pero dice que una vez se había duchado había olvidado la toalla para secarse, con lo cual llamo a Carlos, le dijo "Carlitos por favor puedes venir y darme una toalla del toallero que se me ha olvidado, Carlitos acudió rápidamente diciéndole al compañero que siguiera midiendo él(Pepe), llego al baño y cuando vio a mi mujer toda mojada y con ese chocho cubiertito de pelo, se agacho y ...
... le dijo a mi mujer, señora le voy a dar la mejor comedura de coño que le han dado en su vida". Mi mujer le dijo menos lobitos machote a ver tómalo se abrió de piernas y Carlitos empezó a abrírselo lo labios con la manos y se fue directamente al clítoris, el cual estaba existido y mojadito, mi mujer al sentir el calor de la lengua de Carlos, empezó a gritar como una loca ! sigue, sigue corazón" tu sí que sabes comerte una almeja fresquita sigue, sigue ahí ahí, me vas a hacer que me corra con tu lengua más... más… más, que gusto que gusto, me vuelves loca muchachote, me corro, me correrlo, que caliente estoy ya, ya yaga., mi mujer estaba corriéndose y Carlitos con la otra mano se estaba quitando el mono pata meterse en la ducha con mi mujer, abrieron nueva mente la ducha y él entro con su polla ya bien tiesa deseándola metérsela a mi mujer, ella le contesto un momento que me recupere, mientras te la lavo y te la chupo un poco no te parece. Carlos contesto que lo de lavarla estaba de acuerdo pero chupársela no porque era la mujer que mejor se la había chupado en su vida y se iba a correr enseguida y lo que quería es metérsela y probar la suavidad de las paredes del coño de mi mujer jajá. Mi mujer empezó a reír y a lavársela, lo que hacía que Carlos se pusiera más caliente todavía, y no podía aguatar más, con el jabón gel que cubría su polla toda dura como un hierro levanto a mi mujer a pulso abrazándole mi mujer con sus piernas la apoyo contra la pared y se la metió de un solo ...