Sometida por puta II Mi presentacion en sociedad
Fecha: 10/12/2017,
Categorías:
Dominación
Autor: fersumisa, Fuente: RelatosEróticos
Luego de estar masturbándome un buen rato decidí) empezar la tarea que me había ordenado mi amo, así que abrí mi closet y separe toda la ropa que había decidido vender para luego comprarme “ropa de puta” como la llamaba el señor Álvarez. Luego de dos horas ya había separado todo quedándome unas 4 minifaldas muy cortitas, dos tops, tres blusas escotadas, dos pantalones ajustados y una blusa blanca traslucida para usar y de ropa interior solo tres hilos dentales y dos baby dolls. Una vez hecho esto me puse uno de mis hilos dentales blanco y me fui a acostar. Al día siguiente me desperté temprano desayune me duche y me puse una minifalda negra muy ajustada que apenas me tapaba las nalgas, la blusa traslucida y un par de zapatos con tacones sin ropa interior tal como quería el señor Álvarez. Al mirarme al espejo, noté como se me notaban los pezones tras la blusa y como se marcaba mi cola, si había logrado el objetivo de verme como una puta aunque algo recatada, así que decidí darme un toque de maquillaje para verme mas provocativa pintándome los labios de un rojo intenso y dejando mis ojos mas rasgados, finalmente tome la ropa que vendería y Salí a la calle. Me sentía extraña el frio subía por mis piernas hasta mi vagina algo que nunca había experimentado, mi forma de caminar y vestir atraían las miradas de la mayoría de los hombres, al pasar por una obra en construcción los albañiles me empezaron a silbar y gritar cosas hice caso omiso debía apurarme si quería llegar temprano ...
... al trabajo. Tome el microbús, venia lleno así que tuve que ir parada, en el trayecto sentí más de una vez que me tocaban el culo con morbo e intención pero nada podía hacer. Por fin baje camine dos cuadras y llegue al lugar donde compraban ropa usada entre y vendí toda mi ropa por una cantidad suficiente como para comprarme al menos unas 25 prendas de las que mi amo había ordenado, miré el reloj, ya no haría a tiempo para eso, decidí irme directo al trabajo que estaba a cuatro cuadras, en el camino comencé a sentirme nerviosa, era mi presentación ante mis compañeros de trabajo con mi “ nuevo look” Al llegar el portero del edificio me saludo y me miro de arriba abajo sin disimulo y me sonrió cuando llegue a la oficina, mis compañeros varones me saludaron sin poder disimular su cara de asombro, mis compañeras me miraron con extrañeza y una de ellas me pregunto si tenía una cita después del trabajo a lo que le respondí que no. Al principio me sentí algo incomoda pero luego con el correr de los minutos me acostumbre y me dedique a trabajar, sin embargo note que mis compañeros varones se acercaban a mí con la excusa de preguntas de trabajo, para mirarme las tetas y las piernas. Por fin llego la hora de la comida la que opte por aprovechar para ir a comprar mi “ajuar de puta” rechazando las insinuantes invitaciones a comer de mis compañeros varones. Primero fui a una lencería donde compre varios baby dolls, bodys, ligueros, ligas, tangas hilos dentales y medias, luego fui a una ...