Don Alfredo.3 - Relatos Eróticos

Don Alfredo.3

No le hice caso al viejo y rendido y tendido en la cama me quedé dormido. No sé el tiempo que pasó, era el viejo me despertó con su pedazo de cuero pasándomela por la boca, instintivamente empecé a pasarle la lengua como si fuese un chupetín, hasta dormido sos puto, se mofo el viejo, pared con lo que estaba haciendo y me desperté, el viejo ya la tenía como queriendo endurecerse de vuelta, deja deja, cámbiate que nos vamos, porque sino arranco y no nos vamos nada eeh!! Me amenazó el viejo. Con la velocidad de la luz me paré y me vestí, igualmente ya toda esa situación empezaba a causar un morbo en mi cabeza, no podía entender, todo esto raro que me estaba pasando del golpe, no podía entender que un viejo de 55 años, me hiciese y dijese todo lo que esté viejo decía y hacía, a un chico de 15 años como yo, igualmente más allá del dolor que sentía que ya se me estaba yendo, toda esa situación me gustaba: acá no estaba ni mamá ni papá para que me defendíeran, estaba yo solo contraste viejo degenerado, y al fin y al cabo me gustaba ser poseído y me gustaba este viejo también, salimos a caminar por la calle corrientes y Don Alfredo era ese tío macanudo que a todos nos gustaría tener, recorrimos montones de lugares lindos en esa noche y terminamos comiendo pizza estaba buenísima todo me gustaba y cada tanto el viejo me pasaba su brazo por encima de mi hombro y a la vista de cualquiera parecía como que era un padre o un tío con su sobrino pasándola bien, y así la estaba pasando, en un ...

... momento nos dimos cuenta que empezaría a llover, y se iba a interrumpir nuestro paseo. Tomamos un taxi y nos fuimos al departamento.En el camino le pregunté al viejo por sus hermanas, Él me dijo no viven conmigo vive en el departamento de enfrente, cómo vive ?pregunté, si!! Es una sola, no dos. Y porque en casa dijo que son dos?? Le pregunté. Para darle un contexto más familiar a tus viejos. Me respondió. Yo no entendía por qué, inventarios historia. Llegamos edificio, y se fue el tío bueno para venir el viejo perverso, ahí donde se transformó nuevamente en el viejo que me había roto el orto hacia un ratoempezó acariciarme el culo desde que entramos a del edificio hasta que llegamos a su departamento. Me decía cualquier guarrada, en ese momento eran cosas que a mí me costaba entender y es el día de hoy que tampoco las entiendo, qué viejo degenerado!!!. Entramos al departamento y se abalanzó encima mío como si fuese un león a su presa. Me besaba por todos lados me pasaba su lengua como si yo fuese un chupetín, por mi cara y cuello las orejas, Miami lejos de molestarme me provocaba una gran calentura, el perfume del viejo, las formas en que me tocaba y me chupaba, era como que me subyugaba, y comencé a responder Yo también con los besos, ese viejo me calentaba muchísimo, no me importaban su gran bigote ni su enorme panza, su piel era muy suave, su perfume era atrapante, me encantaba ese viejo!! Mucho manoseo no fuimos sacando la ropa hasta que llegamos a la habitación, la señal ...