1. Mi inocente hijita


    Fecha: 20/06/2020, Categorías: Incesto Tus Relatos Autor: Peter, Fuente: computo.ru

    Lo que les voy a contar es lo que me está pasando y que después de leer algunas historias en esta página me he dado cuenta que hay muchos que, como yo, practican incesto con sus hijas.
    Tengo 35 años y hace 10 me comprometí con Evelina, una chica que conocí en una discoteca 2 años menor, con quién tuvimos una hija.
    Evelina era una mujer muy liberal y al parecer no le gustó la vida de pareja y decidió abandonarnos cuando nuestra hijita tenía 4 añitos.
    Mi hermana, que vivía cerca a mi departamento se ofreció a ayudarme con Luisa, así se llama mi hijita. Para cuidarla durante el día mientras yo estaba en el trabajo y por la tarde yo pasaba por ella y la llevaba a casa.
    Mi hijita es una niña muy despierta y juguetona yo siempre he jugado con ella sin ninguna mala intención. Su mamá siempre fue quien se encargaba de bañarla y limpiarla cuando iba al baño.
    El primer día cuando llegue con ella a casa le dí su cena después de ver televisión un rato le dije que ya era hora de dormir ella me dijo quiero ¡orinar papito! La lleve al baño  bajé su pantaloncito y su calzon y la senté y salí y ella ma llamo para decirme que ya había terminado, yo le dije ¡secante y sal del baño! ella me dijo: mi mamá me seca!. Está bien yo te secare! le dije y cogí papel higiénico y le seque su vaginita. Hasta ese momento no había tenido ningún mal pensamiento para con mi bebé pero al tocar su rajita con su piel tan suave y durita sentí como una corriente por mi cuerpo qué hizo que mi pene comenzara ...
     a pararse y seguí tocándole la vaginita por un buen rato mientras ella me miraba, serró sus ojitos  y le escuché un pequeño gemido. Entonces reaccione y me dije: ésto no puede ser! No podía creer que mi propia hija haya provocado en mi ése pensamiento, así que subí su calzoncito y su pantalón y la llevé a su cama y le dí su pijama para que duerma pero ella me dijo que su mamá le ayudaba a cambiarse de ropa. entonces con mis manos temblorosas por lo exitado que estaba le saque todo su ropita para ponerle el pijama y ví su cuerpito desnudo, su culito redondo y levantado, como su madre. Y  antes de vestirla acaricié sus nalguitas y pasé mi mano por toda su rajita hasta llegar a su vaginita y ella volvió a suspirar entonces hize un poco de presión con mi dedo medio hasta tocar su pequeño clítoris y mi bebé dió un gemido diciendo papito me haces cosquillas, y yo seguí frotando suavemente su botoncito hasta que su cuerpito se estremeció y sentí como mi mano se mojaba con con los jugos que salían de su tierna vaginita. Le pregunté te gustó? Y ella sólo movió la cabeza diciendo que si mientras yo me lamía la mano saboreando ese nectar saladito que tenía un olor tan exitante que me estaba volviendo loco. Entonces pensé, ésto no puede ser, debo parar y tomé su pijama y la vestí rápidamente y
    le dije que se duerma y me fuí a mi cama con mi mente confundida, no podía dormir pensando en lo que abia hecho. Me sentía un mal padre, un monstruo, sin embargo no podía sacar de mi mente ésa ...
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