Helena y la despedida de soltero
Fecha: 15/11/2017,
Categorías:
Anal
Sexo en Grupo
Sexo con Maduras
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... fondo, sin detenerse, para luego comenzar a bombear con un ritmo que me pareció infernal.“Qué buena concha tiene esta veterana, muy caliente” Comentó el muy desconsiderado a sus amigos, que rieron a carcajadas. Realmente el pibe se movía bastante bien y me estaba calentando bastante mal, pero no quería darle el gusto de mostrarles que estaba disfrutando de esta especie de violación. El primero terminó muy rápido. De repente sentí que su semen me invadía y apenas terminó de descargarse se salió de mi cuerpo. Enseguida ocupó su lugar el segundo, con una pija apenas más gruesa, pero mucho más dura. La fue metiendo muy despacio y cuando llegó a fondo se inclinó a lamerme la oreja y preguntarme suavemente al oído: “Te duele mucho, nena?”Le respondí sonriendo: “Ah, ya me la metiste?”. Eso le m*****ó un poco, ya que comenzó a bombearme con mucha fuerza, como queriendo lastimarme. En realidad, sentir esa pija en el fondo me calentaba cada vez más, hasta que en un momento tuve un orgasmo silencioso, mientras el pibe también acababa por fin.El tercero quería probar algo distinto, ya que apenas ocupó su lugar entre mis piernas, quiso meterme su verga por la cola. Le pedí que no lo hiciera, porque ni siquiera mi marido tenía ese privilegio. Pero naturalmente mi queja fue inútil. Sonrió diciendo a sus amigos que me sostenían: “Upsss, la trola es casada y con el culito virgen, todo para mí…” Mientras los otros reían, sentí que la punta de la pija de este pendejo se abría camino ...
... suavemente dentro de mi estrecho ano. Muy despacio la fue metiendo, haciendo que me doliera un poco porque entraba sin lubricar, pero la excitación le jugó una mala pasada, ya que en un par de segundos pude sentir que derramaba toda su leche en mi interior. No pude hacer otra cosa que reírme y le dije que si él no fanfarroneaba de haberme roto el culo, yo no iba a decirles a sus amigos que era un eyaculador precoz. Me insultó muy ofendido y se encerró en el baño, mientras los otros dos se relajaron y salieron a tomar un poco de aire al jardín.Me quedé en el salón a solas con el pobre Facundo, todavía maniatado a la silla y sin poder ver nada de nada. Me acerqué muy despacio y le separé las rodillas con mis piernas. El contacto con mis sedosas medias lo hizo reaccionar, ya que de inmediato su verga recobró la rigidez. Me incliné sobre ella, la envolví con una servilleta de tela y comencé a masturbarlo hasta que lo hice acabar. Mientras se recuperaba le planté un besito cariñoso en los labios y le desee suerte con Fernanda.Quería saber el destino de Helena, que continuaba jadeando a los gritos detrás de la puerta cerrada, por lo tanto me imaginé que estaba disfrutando al máximo del sexo grupal entre los seis pendejos. Por otra parte, no quería que me despedazaran también estos últimos, así que salí al jardín del fondo y me asomé a una ventana entreabierta para disfrutar un poco del espectáculo.Mi amiga estaba en cuatro patas sobre la cama, uno de los chicos la tenía aferrada por las ...