Me volvi una puta
Fecha: 14/11/2017,
Categorías:
Gays
Autor: Alonso70, Fuente: SexoSinTabues
Si alguien me hubiera dicho hace 17 años que a mis 45 iba a estar mamándole la verga a alguien y que me iba a encantar que me cogieran como una puta seguramente me hubiera burlado y jamás lo hubiera tomado en serio, pero...es verdad me volví una puta y me encanta la verga. Si alguien me hubiera dicho hace 17 años que a mis 45 iba a estar mamándole la verga a alguien y que me iba a encantar que me cogieran como una puta seguramente me hubiera burlado y jamás lo hubiera tomado en serio, pero...es verdad me volví una puta y me encanta la verga. Todo comenzó hace poco mas de 15 años, casi al cumplir los 30 empecé a tener problemas con mi pareja y no tenía nada que ver el asunto sexual, ella y yo teníamos una muy satisfactoria intimidad, más bien los problemas fueron por dinero, decidió dejarme y después me mando los papeles del divorcio, en ese entonces era empleado de una empresa de publicidad, y apenas cubría los gastos más necesarios con mi sueldo, y rara vez teníamos la posibilidad de darnos algún lujo, solo cuando tenía tiempo extra y me pagaban bien. 10 años antes de casarme conocí a Beto, era un maduro bohemio pero claramente se le notaba su lado gay, pero a mi en lo personal eso no me importaba, ambos cantábamos en la hostería de su hermano y nos llevábamos muy bien, además de bohemio era médico cirujano, y me llevaba como 15 años, cuando mi divorcio se dio, me puse muy mal anímicamente, y él como buen amigo me daba consejos, y me daba ánimos para sobrellevar mi perdida, ...
... una ocasión que estábamos en su casa ya con unas copas encima, se ofreció a darme un masaje para reducirme el estrés, como yo ya sabía para donde iba, muy cortésmente rechace su ofrecimiento y me despedí dirigiéndome a casa, y el noto porque, había sido mi sutil rechazo pasaron un par de semanas y el ofrecimiento se volvió a dar y antes de que lo rechazara me miro y me dijo. Se lo que piensas, pero créeme es solo un masaje, es para que te sientas, mejor, si sientes algo que no te guste en ese momento me lo dices, paramos y tan amigos como siempre, pensé que me estaba viendo mal prejuzgándole, y decidí dejarme dar el masaje, me pidió que me desnudara y me acostara boca arriba sobre una mesa de trabajo de madera robusta que tenia, y solo me cubriría mis partes intimas con una toalla, empezó a masajearme desde los pies, un haaaa, se salió de mi boca, y es que en verdad se sintió rico y relajante, ¿Ves, relájate, y disfrútalo, cuando termine seguramente te sentirás mucho mejor, y si, pero no tenía yo ni la menor idea de cómo. Siguió sobando mis pies, mis piernas, y después subió a mi cintura y mi pecho, después mi cuello, y la sensación que tenia me dio la confianza de relajarme y dejarlo hacer su trabajo, después me pidió, voltéate por favor, me puso boca abajo, y coloco la toalla encima de mis nalgas que modestia aparte están muy bien, bueno eso me han dicho, empezó de la misma forma con mis pies, después mis pantorrillas, y mis muslos, y antes de tocar mis nalgas, subió a mi ...