Ricura placentera.
Fecha: 18/03/2019,
Categorías:
Sexo Oral
Tus Relatos
Autor: andy panda, Fuente: computo.ru
Hola, soy andy de 40 años, me encanta el sexo oral, lea contaré una experiencia de hace unos dias con Laura, una chica de 30 años, preciosa la mujer, senos grandes y firmes, tiene un culito bien parásito, un coño que envidia a tantas mujeres y que sería anhelado por muchos hombres. Bien, me encontré a Laura hace unos dias en una cafeteria, nos saludamos muy cariñosamente, platicamos sobre nuestras vidas, nuestras experiencias de amores, y termino por contarme su decepxion amorosa con su novio, asi que prefirió seguir soltera. De mi parte le conté que estando divorciado era mejor que estar casado. Después de unos tragos me invito a su departamento, muy bonito por cierto, confortable, ahí tomamos otros tragos y termino por pedirme una noche de placer, ambos lo pediamos y experimentar algo nuevo en nuestras vidas. Nos besamos apasionadamente, mientras que nuestras manos se ocupaban de palpar nuestros genitales, pasaba su mano por encima del pantalón sintiendo como mi pene iba creciendo y poniéndose duro, yo en cambio sentía como a través de su tanga empezaba a humedecerla. Sin mas y sin prisa fue desabrochando la cremallera y con toda delicadeza pudo sacar mi pene, ya para ese momento estaba súper duro, y enorme, me comento que lo tenia precioso y se veía apetitoso, con sus labios fue besando cada centimetro, en verdad lo disfrutabamos ambos, podía sentir la calidez de su boca en mi pene, lo besaba apasionadamente, le gustaba mucho mi pene. Besaba la cabecita de mi pene con ...
... mucha pasión, lo chupaba de una manera rica, cual niño con su caramelo no lo soltaba por nada, me comentaba que mi liquido preaeminal era muy sabroso, pues tenia cierta dulzura, que era como una miel exquisita, por eso disfrutaba de cada gota de mi lubricante, termino por quitarme el pantalón y mi tanga, por cierto muy diminuta, ya que me gusta que solo cubra mis testículos y mi pene. Una vez fuera mi ropa , me recostó en su cama, subió mis pies en sus hombros y abierto de piernas, contemplo la maravilla de mi sexo, acostumbro a ir a un centro de depilación permanente, asi que mis testículos, mi ano y mi pene no tienen un solo vello que se asome. En verdad le encanto acariciar todo, pues como ella decía, tenia una textura muy suave, pero ella seguía disfrutando de mi pene, lo besaba mas apasionadamente y con mucho ahinco, tomaba con su boca cada uno de mis testículos y dentro de ella, jugaba de manera placentera, podía experimentar como cada uno de mis huevos en su boca me daba mas palcee inimaginable. Primero cada uno de mis bolas y después las dos juntas en su boca. Me pidió si podía hacerme algo que siempre quiso hacer con su ex y que nunca le dejó por prejuicios éticos, le afirme que si lo hiciera, pensando que seria algo muy agradable. En su cajón de buro, saco un par de ligas elásticas, muy suaves, y de un tamaño pequeño. Ella seguía succionando cada uno mis testículos, con cada una de la ligas sujetaba cada uno de mis huevos, asi que imagínense, mi pene bien erecto, y ...