juegos de pareja
Fecha: 24/08/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
pareo y la bikini abajo, lo cual era una imagen aún mas excitante ya que permitía adivinar lo estrecho y diminuto del traje de baño. - La idea era que Jorge observara desde el piso de arriba lo que pasara, ya que desde la planta alta de la casa vecina, los albañiles tendrían un espectáculo especial y Jorge podría observar su reacción ante el espectáculo que estaba a punto de ofrecerseles. - Adriana comenzó a regar las plantas todavía con el pareo puesto, y circulaba por el jardín de un lado a otro, haciendo pequeños ruidos como para llamar la atención de los albañiles. Jorge pudo observar desde la ventana del dormitorio como uno de ellos codeaba a otro señalando a Adriana, sorprendido en parte por su presencia. El murmullo suscitado entre ellos, confirmo a la mujer que contaba con su entera atención. Entonces fue hasta una reposera y muy lentamente deslizo su pareo dejando a la vista su cuerpo vestido con ese bikini que a duras penas cubría parte de su anatomía. Luego de colocar el pareo sobre la reposera, para lo cual se agachó groseramente ofreciendo una inmejorable vista de su cola, siguió con la tarea de arreglar las plantas, y en ese trajin se agachaba y se ponía en cuclillas una y otra vez, moviéndose de aca para alla, motivo por el cual la delgada línea de la tanga del bikini, prácticamente se perdía en su cola, no dejando nada a la imaginación. Sabia que en ese momento era el centro de atención de los albañiles que observaban cada movimiento con atención, no ...
pudiendo creer en su suerte al tener semejante mujer ante sus ojos. Adriana miro hacia la ventana del dormitorio y pudo ver a Jorge, que la observaba consintiendo con mirada cómplice cada movimiento. Eso la alentó a continuar con el juego, ya excitada con el desarrollo de los acontecimientos y pensando en como llevar mas allá el juego. Lentamente, se acostó en la reposera, que colocó bien en frente a la pared divisoria, en donde ella no podía ver a sus observadores pero ellos y Jorge si. Eso la tranquilizaba porque no tenia una visión directa de ellos, aunque suponía que estos no perderían detalle de cada movimiento que hiciera de ahora en mas. Abrió sus piernas y coloco sus pies sobre el borde de la reposera, con lo cual el diminuto tanga apenas cubria su entrepierna. Subio sus brazos por encima de la cabeza haciendo que sus generosos pechos se elevaran, colocando sus manos por detrás de la cabeza, el bikini apenas cubria sus pezones, los cuales ya estaban duros por la excitación de sentirse deseada por esos hombres y que Jorge disfrutara de ello desde la ventana del dormitorio. - Desde su escondite Jorge pudo observar que los dos albañiles habían llamado a otros dos y que los cuatro observaban atónitos a su esposa haciendo comentarios que si bien no podía escuchar, imaginaba se referían a lo buena que estaba, las cosas que le harían, etc, etc. Adriana por su parte desprendió su corpiño y sin mucho apuro por taparse se tumbo boca abajo en la reposera, por lo que los albañiles ...