un cafe con mu cuñada - Relatos Eróticos

un cafe con mu cuñada

Eran las tres de la tarde y me dirigia a visitar la casa de mi chica, mi sorpresa al tocar la puerta y ver que quien me recibe es nada mas y nada menos su hermana, hola le digo y tu hermana?, no está salio con nuestra madre y se demoraran un poco pero pasa que te preparo cafe.llevaba una falda ajustada que le llegaban a sus rodillas, no podia evitar ver sus piernas blancas y sensuales y subir mi mirada hasta su trasero, movia sus caderas lentamente como si bailara una melodia secreta mientras preparaba el cafe, de pronto se voltea y descubre que todo este tiempo miraba su delicioso trasero y solto una risa nerviosa y mordió su boca. Al terminar el cafe le dejo saber lo delicioso que estaba y me responde diciendo que todo lo que hace con sus manos lo hace rico no pude evitar sentirme caliente por su comentario y ella ve mi entrepierna y nota lo mucho que lo tenia parado y mueve sus piernas entre si como intentando sentir mi pene en su sexo y yo no disimulo mi erección si no que permito que se me pare todo y veo como ella se pone mas nerviosa y no para de mirarme y le pregunto te gusta? ella responde que? y le digo tu sabes que, esto y sujeto mi paquete entre ella, se ...

... que no has parado de saborearlo desde que nos hemos sentado y tampoco dejar de verlo, se quedo paralizada con mi respuesta y le dije vamos si tanto te gusta... y baje lentamente el cierre de mi pantalon. no dijo nada se quedo muda viendo como sostenía ante ella mi pene lo miraba hipnotizada y yo me masturbaba para ellapronto comenzó a acalorarse y soltar su cabello tocar sus piernas y chupar sus dedos, VEN le dije. y obedeció sin mas insistencia,quiero que abras tu boca para mi y me lo chupes, obedeció por completo chupaba mi pene como si estuviera sedienta mientras yo acariciaba su sexo y me percataba de lo mojada que ya estaba, hice a un lado sus pantaletas y la coloque contra el mueble y le devore su sexo y luego lamí todo su culo, ella no hacia mas que gemir y menear su trasero para mi, la cogí primero con uno de mis dedos explorandola y me decía que le metiera con tres, le dije tu no me das ordenes yo te cojo como quiero y meti mi pene con violencia y grito de placer la tome del cabello y embestí contra ella con furia su rostro estava rojo del placer y yo excitado luego la voltee y le acabe en sus senos y coloque mi pene en su boca para que continuara con mi placer.