1. Follada por un extraño en el baño de la disco


    Fecha: 14/07/2019, Categorías: Anal Autor: chicapervertida, Fuente: RelatosEróticos

    ... desorden. -No te preocupes, soy fan de Merry Popins… quizá tengas muchas sorpresas dentro de ese bolso –respondió riendo con picardía. Me hizo gracia su respuesta ingeniosa, así que de inmediato entre en confianza. Una de las cosas más sexys que puede tener un hombre es un sentido del humor inteligente, que además da visos de su grado de cultura. Cuando por fin apareció el mechero se lo entregue risueña. «¿Te importa si fumo aquí contigo?» preguntó tranquilamente. «¡Para nada!» respondí de inmediato. El chico saco un cigarrillo liado y lo encendió. De inmediato pude sentir por el aroma que aquello era marihuana. Cuando el olor se hizo evidente el chico se giró y me dijo «espero que no te incomode que fume hierba aquí contigo». Simplemente sonreí y no respondí nada. Entonces comenzamos a hablar. Por el acento me di cuenta que era un chico extranjero, creo que de Colombia. Era alto y blanco con cara de intelectual. La conversación era sencilla y amena así que un momento me arriesgue y le dije «¿me dejas fumar un poco?». El chico sonrió y me extendió el porro. «Es todo tuyo» respondió. El efecto no tardó en aparecer. A los pocos minutos estábamos riéndonos y conversando de cualquier tontería. La estábamos pasando muy bien y de pronto me preguntó si quería regresar a la disco a bailar un poco. Creo que fue lo mejor que se le pudo haber ocurrido. Además yo de inmediato sentí unas enormes expectativas porque todo el mundo sabe que los chicos latinos bailan muy, pero muy bien. Así ...
    ... que al momento estuvimos los dos en la pista de baile. La disco estaba a reventar y solo había gente desconocida para mí, así que podía darle el lujo de bailar como me diera la gana. Más a nuestro favor la música que sonaba era reggaetón del que está de moda. Comenzó a sonar una canción de Maluma y el chico me dijo al oído «ese man es de mi ciudad», haciendo referencia a que él también era de Medellin. -¿Entonces bailas cómo él? -le pregunté riendo. -No sé si como él, pero de seguro te gusta como bailo… Y de inmediato se pegó a mi moviéndose como lo dioses. Yo no sé si el efecto de la hierba habrá contribuido a potencializar mi extroversión en el baile, pero debo admitir que si el chico movía las caderas yo no me quedaba atrás. Comencé a moverme lentamente, al ritmo de la música, y poco a poco me iba acercando más a él. De pronto giré y le di la espalda mientras me contoneaba con depravación. No tardo un segundo en tomarme de la cintura y pagarse a mí. Después de eso me desconecte por completo. No sé lo que pudieron haber pensado las personas que estaban a nuestro alrededor (creo que cada quien estaba en lo suyo) pero estoy segura que si alguien hubiese prestado atención, se hubiese puesto cachondo solo con verme pegada a este tío, restregándole mi culo con desparpajo. Cuando comencé a sentir la erección de su polla fue la gloria para mí. Incline mi cabeza hacia atrás dejándole acceso para que su boca se acercara a mi cuello y como si se lo hubiese ordenado telepáticamente, el ...
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