Cuatro amigas de la infancia
Fecha: 07/07/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: murgis, Fuente: CuentoRelatos
... calentaba y mucho, curiosamente Javier no me decía nada, continuaba jugando con migo, entonces le pregunté: No quieres sacarme las bragas? Claro que quiero, pero no me gustaría que te sintieras violenta Eres un sol, le dije apreciando su sentimiento y acercándome para darle un beso en la mejilla, pero hazlo. Inmediatamente se puso bajo el agua, noté como sus manos me cogían la goma de las bragas y tiraba de ellas bajándolas por las piernas, le ayudé en los movimientos y salió con ellas en la mano que también lanzó al borde, me dijo: Desnuda estas preciosa Gracias guapo, le respondí. Realmente aquellos chicos habían conseguido lo que querían, salimos del agua, me costó un poco vencer la vergüenza, era gracioso ver a los tres chicos totalmente empalmados con el vigor que da esta edad, por cierto, que si la polla de los tres era bonita, la de Javier era especialmente grande, detalle que no nos pasó desapercibido a ninguna de las tres ya que tanto Laura como Marta hicieron algún comentario. Otro detalle que tampoco pasó desapercibido es que era la única mujer con pelo en el coño, por eso a Laura y a Marta no le salían pelos del tanga. Seguimos hablando los seis en pelotas, me sentía rara pero contenta y excitada, se acabó el hielo, me fui a la cocina a buscar más y Javier inmediatamente se levantó para acompañarme, cuando entrábamos en la casa oímos gritos y silbidos dedicados a nosotros, me seguía por la casa en pelotas, pude ver como la polla se le movía al ritmo de los ...
... pasos, abrí el frigorífico y él me agarró por la cintura, no sabía qué hacer, sentía como su polla se apoyaba en mi culo, me giré y le pedí que no siguiera, miraba mi cuerpo ahora con toda claridad al estar la luz encendida, pero yo también pude ver aquella monstruosa polla que apuntaba al cielo. Déjame tocar los pechos por favor, me dijo suplicando Javier acabó aceptando, salimos con el hielo, los chicos propusieron poner música, entramos en la sala y Marta les enseñó cómo hacerlo, pusieron unas baladas, inmediatamente nos pidieron para bailar, aquello significaba que estaríamos muy cerca, pero vi que Laura y Marta aceptaban, Javier se acercó a mí y no lo rechacé, me cogió por mi desnuda cintura, yo hice lo mismo con la suya, se acercó, la punta de la erecta polla se paseaba por los pelos del pubis y mis tetas se clavaban en el pecho, vi que Laura y Marta estaban muy pegadas a sus compañeros de baile, los cuerpos se fundían casi, Javier me agarraba por la espalda y poco a poco iba bajando las manos supongo que esperando que le marcara un límite, pero aquello me ponía demasiado caliente para hacerlo así que acabó tocando el culo directamente sin ninguna queja, yo hice lo mismo apoyando la cabeza en su pecho y disfrutando de las caricias que me daba en tal sensual parte, vi que Marta y Laura me miraban extrañadas por los avances que había permitido pero ya poco me importaba, Javier dejó mi culo y puso las manos extendidas en mis costados, poco a poco iba subiendo hasta llegar a la ...