Julián - tercer capitulo - Relatos Eróticos

Julián - tercer capitulo

... mis tetas, y las mías en su cintura atrayéndolo hacia mí, al Néstor sentí que su verga se le crecía rápidamente, luego me voltee, besándolo y me quite la camiseta no tenía sostén por lo que solo quede en mis brasileros, seguía bailando. Al terminar el disco me dirigí a la cocina a traer otras tres cervezas. Sentándome con Julián. La cosa se estaba poniendo caliente y la cerveza fría nos refrescaba. Néstor se paró y fue al baño, levante mi pie derecho colocándolo en las piernas de Julián nos besamos y le acariciaba la verga sobre el pantalón. Néstor regreso y lo invite a sentarse a mi lado mientras seguía besándome con Julián, voltee a mirarlo un momentico y con mi mano le hice señas de que me diera la suya. Agarrándolo y levantando mi pierna derecha me la puse en mi cuquita, ya él siguió acariciándome. Le solté el cinturón y luego le baje la cremallera a Julián metiendo mi mano le saque su verga la que empecé a mamar. Néstor al verme hacerlo se me acerco y besándome la nuca estrujándome, las tetas bajaba sus manos me acariciaba mi trasero, me moví quedando más acostada en el sillón para que Néstor me chupara mi cuquita y seguir mamándole la verga a Julián montada en sus piernas, al rato de estar en esa pose. La puerta sonó, era Mi hija que regresaba, se nos acercó y se quitó la ropa quedando en sus calzones no más y arrodillándose enfrente de Julián compartimos su verga, era la primera vez que mi niña se la mamaba dejándola disfrutar de semejante paquete. - ¿Qué tal te ...

... parece hija? - Ha deliciosa mami. Me vine a toda, tenía muchas ganas de disfrutarla. – Hay hija y yo tenía unas ganas de que te goces esta hermosa polla. Hay te dejo disfrútala mi niña. La deje con Julián y con Néstor nos acomodamos para poderle mamar la verga. Me acosté sobre sus piernas arrodillándome sobre el sillón. Duramos un buen rato mamando verga y luego Ana María se le acomodo colocándose de espaldas a Julián estando parada se agacho agarrándole la verga y se la coloco en la entrada de su trasero, se fue deslizando muy lentamente, su mueca de dolor nos decía que le estaba doliendo, pero ella seguía bajando a sabiendas que después se tornaría en placer exquisito. Y eso fue más bien rapidito que dilato comenzando a follar intensamente, entonces me dieron ganas también y colocándome igual me metí la verga de Néstor por mi trasero. Así ambas disfrutamos teniéndolos dentro de nosotras, sus cilindros de placer haciéndonos gemir, gritar, estremecer nuestros cuerpos que gozaban con cada penetrada, yo la miraba viéndole sus ojos desorbitados, ¡al igual debería estar yo! Sentí una alegría tan grande al verla hay con él Julián gozándoselo disfrutar de su gruesa verga la que me ha llevado a placeres exquisitos e inolvidables. No me quiero imaginar cómo sería, si David nos viera en estas. Le daría un patatús, soponcio y ataque cardiaco de la ira que le daría. Estar ahí con su enemigo hasta de pensamiento político. Ya que el Julián es derechista y mi David es izquierdista. Me levante y ...