El mejor consuelo lo encuentro en la bragueta de mi tío
Fecha: 18/05/2019,
Categorías:
Incesto
Infidelidad
Autor: ManuelaDi, Fuente: CuentoRelatos
Mi tío es mi eje y siempre me hace acordar que soy una chica de familia que me gusta disfrutar de ellos fuertemente y hasta la última gota. Desde que mi padre se fue, mi tío siempre ha estado conmigo y me a enseñando mucho, lo más lindo fue cuando me permitió entrar a su bragueta, desde que la desprendí por primera vez jamás he dejado de desear abrirla una y otra vez. La última vez fue el viernes pasado, yo estaba sola en casa, sin nada planificado, era uno esos días que una esta bajón y se replantea cosas como las amistades, la vida aquí, el emigrar en búsqueda de vaya a saber que, el vivir sola, y otras cosas... necesitaba arroparme en los abrazos de alguien, y quien mejor que mi tío. Le envié un mensaje y al minuto me respondió que estaba listo para recibirme que mis primos ya dormían y la tía cuidaba en el hospital a su madre que hace días se está por ir, la probaré veterana. Mi tanga, mis jeans y la salera con transparencias estaba lista, a los 10 minutos ya tocaba la puerta de su casa, a tres cuadras de aquí. Me abrió la puerta y fui sobre sus brazos directamente, llorando y necesitando consuelo, sus manos anchas me apretaron bien fuerte a su pecho he inmediatamente sentí que estaba en el lugar que necesitaba, el me susurraba palabras de aliento. Fuimos al sofá y me acosté sobre sus piernas mientras hablamos sus manos acariciaban mi pelo y mi cara, yo ya estaba tranquila y la charla se fue de tema recordamos nuestra primera vez juntos. Fue algo parecido a este viernes ...
... que les cuento, sólo que yo entré a su puerta llorando por haber visto a mi novio coquetear con otra, y él me tomó de la mano, me llevó a su cuatro y se puso frente a mí para sin más decirme: - voy a darte lo que mereces y sé que deseas, lo he visto en tu cara cuando asomas a la puerta y tu tía me la está chupando-. Era real que lo deseaba, cuando me iba de niñera a cuidar a primo me quedaba a dormir, ellos llegaban de su cena y los sentía tener sexo. Yo me asomaba a la puerta de su dormitorio para ver como mi tío, con su verga hermosa dejaba a mi tía exhausta de tanta matraca, tanto que ella terminaba pidiendo clemencia y buscando que el tío acabará finalmente colgada ella de su verga con la boca llena de carne. Aquella noche fue como está vez, lentamente comencé a tocarlo por encima de su pantalón, sintiendo como su verga crecía toda para mí. Sus manos se comenzaron colar en mi solera de transparencias y el comenzaba a jugar con mis pechos, haciéndome olvidar porque estaba ahí, y sólo quería que mi tío se apoderara de mi cuerpo. Me fui al suelo de rodillas, él en sofá abrí sus piernas quite mi solera, lo mire fijo a los ojos sosteniendo la mirada, su sonrisa y su mano quitándome el pelo de la cara me habilitaron a lentamente abrir su bragueta y descubrir que su verga estaba lista y toda en mi boca. Con la misma intensidad y deseo que la primera vez, pero con la experiencia de saber lo que más le gusta, le pulía todo su glande con mi lengua, al tiempo que mis manos sujetaban ...