Cornudo humillado
Fecha: 14/05/2019,
Categorías:
Voyerismo
Sexo en Grupo
Tabú
Autor: parejafartun, Fuente: xHamster
... Indio, un poco desfachatadamente, lo que hizo que los dos vagos aprovecharan para manosearla con disimulo. Cuando regresó, caminaba insinuante y sensual, como una modelo, sexy como nunca. La vi erguirse al pararse delante de José y éste comerla con la vista.—Voy a tomar un poquito se sol, amor —me anunció.—Ya le traigo una reposera, señorita —dijo solícito don José.Se puso a tomar sol junto a la pileta. Se tiró boca arriba y se puso protector. El casero le daba indicaciones a los dos chicos mientras yo seguía bombeando. Como a la media hora Tami se dio vuelta y llamó a don José, para que le pasara bronceador por la espalda.—Mi amor, yo te puedo pasar —reclamé.—No, bichi. No quiero hacerte perder tiempo. Vos seguí bombeando que vas re bien… —se dio media vuelta sobre la reposera y quedó de espaldas. El casero ya se estaba embadurnando las manos con crema y mi novia se desabrochaba el corpiño.Comenzó a aplicarle el protector sobre toda la piel con suavidad, en la espalda primero, lentamente. El hijo de puta disfrutaba de cada centímetro de piel que magreaba. Y disfrutaba aun mas, estoy seguro, porque yo observaba la vejación a escasos cinco metros. Pronto llegó a los hombros, los brazos, y finalmente se detuvo en la cola. Se llenó las manos de esa redondez perfecta de mi novia y la masajeaba despacio, palpándola y deleitándose con esa carne joven. Yo, carajo, estaba comenzando a tener una leve erección. Pero no de excitación sino de bronca, claro.—¡Mi amor! —no me pude ...
... contener—. ¡Te está tocando!—No seas tonto, me está poniendo protector. ¿Vas a empezar otra vez con tus celos?Pero el hijo de puta del casero le estaba pasando la crema bien entre la raya. Mi novia hizo un movimiento y se enterró la bikini muchísimo más adentro, de forma ya desvergonzada. Y José aprovechó para enterrarle la puntita de uno de sus dedos.Tragué saliva. Mi pija estaba creciendo y endureciéndose de forma inexplicable. Pero seguía con bronca por el avasallamiento. Como no me animaba a decir nada, me desquité dándole más duro y fuerte a la bomba, subiéndola y bajándola con todo, mientras el otro hijo de puta se manoseaba a mi nena.Cada vez que yo bajaba la palanca, el casero le enterraba un dedo entre la bikini y la entrepierna, y cuando yo la subía, él la retiraba. Una y otra vez, y lo hacía a propósito porque me miraba desafiante con cada leve penetración. Mi novia se hacía la desentendida, como si no le estuviera haciendo nada fuera de lo normal. Estuvieron así un buen rato y me di cuenta que Tami se estaba excitando. Por suerte el jueguito terminó rápido, quizá el casero se amedrentó por mi presencia.A media mañana yo estaba tan cansado y sediento que arranqué la manguera de bomberos de la bomba y me bañé en el agua helada. Luego me tiré a descansar y casi me quedo dormido. O me quedé. Cuando recuperé fuerzas me despabilé pero Tami ya no estaba junto a la pileta. El casero tampoco. Miré alrededor. Botellón y el Indio seguían quitando maleza y yuyerío, allá tras, y ...