1. La encantadora de penes


    Fecha: 06/05/2019, Categorías: Sexualidad, Infidelidad Autor: Soficas56, Fuente: CuentoRelatos

    ... y tierno. Quería hacerlo pensar que sería demasiado adorable como para lograr algo en él. Y así fue. Me le pegué y le dije cuánto lo quería. Podía sentir su espalda, bastante fuerte y sus pectorales por el frente. Los acaricié discretamente con mis manos. -¿Estás jugando o qué, niña? -me preguntó queriéndose zafar de mí. Me levanté más para acercar mi boca a su oído y poder respirar un poco en él. -Te lo voy a parar como nadie antes-le susurré con una sonrisa. Le di un beso en la mejilla. Él se quedó callado. Notaba que se puso un poco rojo. Creo que nunca me había escuchado hablando así. Es algo que reservo solo para aquellos que logran llegar a algo íntimo conmigo. En fin, continúe dándole besos hacia el cuello y cerca de su oreja. Aprovechaba cualquier oportunidad para respirar en su oreja. Mientras, con mis manos recorría su cuerpo, sintiendo sus formados músculos. Este niño se había convertido ya en un hombre. Y, yo, por mi parte, comenzaba a excitarme poco a poco. -¿Esto te gusta? -le pregunté en el oído con el mismo tono susurrante. -No está mal... -me dijo fingiendo que no lo disfrutaba. Me seguía retando. -Hmmm... ok... -le respondí confiada. Esto apenas empezaba. Seguía acariciándolo suavemente por su cuerpo, cada vez más cerca de pelvis. Mientras no dejaba de darle besos en su cuello y nuca, ahora dándole suaves lamiditas y así encenderlo más. Lamí un poco de su oreja para suspirar frente a ella y sintiera lo frío del aire. Estaba siguiendo una de mis rutinas ...
    ... con mi mejor amigo. Qué locura. Pasados unos minutos, finalmente bajé mis manos a sus piernas. Las acaricié de arriba abajo, cada vez pasando mi manos más cerca de su entre pierna, insinuando el tacto que se venía. Tenía bastante control, pues no se veía ningún bulto en su pantalón. Así que me decidí a darle la primera caricia. Y así fue, de abajo hacia arriba, muy suave y con timidez. -Qué suerte debe tener tu novia -le susurraba al oído- seguro que le encanta. -le dije elogiándolo. -No creo que se queje... -me dijo soltando un ligero suspiro. -Para nada jeje -le respondí. Comencé a masajear su pene. No sé si era por la mezclilla o que no estaba haciendo efecto mi técnica, que no notaba que se parara. ¿Qué pasaba? ¿Puede alguien tener tanto control? Decidí arriesgarme; desbroché su cinturón. -¿Qué haces? -reaccionó de inmediato- eso es trampa-me regañó. -Claro que no -le contesté sin parar de desabrochar su pantalón-la regla era no enseñar mi cuerpo-le di un beso en la mejilla- ya, relájate-le ordené. Bajé el cierre de su pantalón, y ahí estaba, su bóxer rojo. No podía verse mucho pues la tela apretaba bastante. Así que lo hice levantarse un poco para bajar el pantalón hasta el piso. Un bulto enorme estaba marcado en su bóxer. La mezclilla era la que no dejaba ver nada. -Eso sí es trampa -le dije mientras agarraba su miembro sobre el bóxer-esconder tu erección con tela gruesa -le dije al oído. -hmmm -suspiró. Seguí acariciando su pene un buen rato. Se sentía largo y duro. No ...
«1...345...»