1. Mi primera vez


    Fecha: 25/04/2019, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... lado. Cuando nuestras miradas se encontraron, una mínima sonrisa suya me permitió entablar una pronta conversación y hacer las presentaciones de rigor con mis amigos. Ellos decidieron invitar al baile a las hermosas féminas que allí sobraban y otro tanto hice yo con Iris. En la pista de baile sus contoneos y movimientos voluptuosos, ahora tan cerca, empezaron a secarme la garganta y me produjeron una erección que creí seria eterna. Mis ojos se embelesaron con aquel cuerpo arrebatador, aquella cara angelical y aquel cabello de sirena, enmarcados en la sensualidad del baile… …Aquellos ojos me habían absorbido por completo y aquel cuerpo, grande y fuerte, me cubría totalmente; La boca me hormigueaba y el cuerpo se me erizaba, estaba perdiendo la noción y el juicio. Ern, se acercaba cada vez más y ya no podría esquivarlo por mucho tiempo. Sus manos grandes se habían aferrado a mi cinturita y sus labios surcaron suavemente los míos, lo cual prendió las alarmas y me devolvió a la realidad. Paré el baile y le sugerí que debíamos por lo menos conocernos un poquito y que ya era hora de marcharme. Él se ofreció gentilmente a llevarme en compañía de sus amigos, los que también estuvieron de acuerdo, cosa que agradecí pues mi "novio" me había dejado tirada y sin transporte… …Memo tomó el volante del coche y en el puesto posterior nos sentamos Iris y yo, mientras Tito ingresaba por el lado contrario, quedando ella en medio de los dos, indicándonos enseguida su dirección en una ...
    ... urbanización en las afueras de la ciudad. Partimos bien entrada la medianoche y al interior de mis pantalones la erección era patente y mi miembro lloraba constantes gotitas que empapaban la parte delantera de mis pantaloncillos. Mi brazo se tendió sigiloso por encima de los hombros de Iris y mi mano se apoderó de uno de sus suaves y firmes senos, mientras la otra ingresaba debajo de su minifalda acariciando sus tersas piernas. Enseguida mi boca se prendió, golosa, de aquellos labios rojos y carnosos, ingresando mi lengua libidinosa en los recovecos de aquella boca y entrelazándose con la suya. Tito no perdía tiempo y acariciaba el vientre de aquella hermosura, a la vez que su otra mano ingresaba por la espalda debajo de la blusa… …¿Qué estaba pasando? Mi cuerpo se había erizado, respondiendo gustosamente con el ingreso de aquella lengua a mi boca, a la vez que, lujuriosamente, aquellas manos acariciaban mi cuerpo ¡Me resistí! De un empujón aparté a Ern y Tito, mientras la entrada a la urbanización donde resido pasaba de largo ante mis ojos. Solicite a gritos mi retorno, agrediendo a Memo que iba al volante, cuando aquellas grandes manos que me habían acariciado, ahora me retornaban bruscamente a mi lugar y un arma desenfundada contra mi sien hizo que comprendiera la cruda realidad… — ...Verás, preciosa... Ahora te daremos el triple de lo que negaste a tu noviecito y te sugiero que lo disfrutes, pues como ves no somos unos chiquillos. Dijo Tito, mientras sostenía el arma… …ante la ...
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