MI PERRITO A CUIDAR
Fecha: 25/04/2019,
Categorías:
Zoofilia
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
Si bien es cierto me dejó lleno de leche aún pienso en el Como les estaba contando el otro día, quedé al cuidado de un lindo perrito y como estos días han sido de mucho trabajo no he tenido la posibilidad de tener un nuevo encuentro, debido a que voy a su casa y tengo que volver de inmediato. Pero mi mente no se aparta de él y sigo pensando en como lo haré a la próxima. Hasta que se dió el momento y el tiempo necesario, mi corazón latía muy fuerte a medida que me acercaba a su casa y él me recibió en la reja con gran entusiasmo, entré y de inmediato me comenzó a dar muestras de felicidad al verme se paraba en dos patas sobre mi pecho corría y saltaba de alegría. Yo entré por la puerta trasera y me coloqué una remera grueza que tenía preparada para la ocasión a fin de evitar los rasguños en mi espalda me despojé de toda mi ropa quedando con mis pompis peladas. Chocolate, tímidamente se paró a la entrada posterior y yo había colocado una alfombra vieja sobre el piso y me eché sobre ella como una verdadera perra, a todo esto mi culito pensando independiente de mi mente estaba ya completamente mojado y muy caliente, como un volcán de placer a punto de hacer erupción: chocolate comenzó a rondarme y olfatear a su presa, primero me recorrió entero con su fría nariz y puso el mayor énfasis en la entrada de mi rajita que temblaba de emoción y calentura, yo lo dejé hacer y me lamió la cara el cuello y luego se fué directo a mi ojete dándome languetazos largos y calientes como tratando ...
... de introducirla lo mas profundo posible en mi culito redondo y caliente. Yo con la calentura me volvía de lado a lado para que lamiera todo mi culito que ya chorreaba de baba de perro muy resbaloza y tibia. Acto seguido me coloqué en cuatro con mis pompis bien paradas ofreciendoselas a mi amor que de inmediato comenzó a lamerlas pero esta vez la pasaba hasta los mismos huevos, lo que me causaba más y mas excitación al sertir como mis huevos se batían contra mi bajo vientre con cada una de las lamidas. Chocolate comenzó a excitarse e intentó una primera arremetida y sentí como me picaneaba muy por debajo pasando su pija por entre mis muslos, me dí cuenta que no podía hacer un buen pié y de inmediato abrí mis piernas y baje mi culito casi a ras del suelo, el comenzó a entrar en desesperación y no podía apuntarle a mi culito, ante lo cual metí nuevamente mi mano derecha por debajo de mi abdómen y a la primera ocasión le tomé firmemente su pija por detrás de la bola y la dirigí diréctamente a mi rajita, sentir como me entraba y lanzar un gemido de perra en celo fueron un misma cosa, chocolate comenzó un mete y saca desesperado pero igual no hacía buen pié puesto que trataba de subir sobre mis ancas y quedaba literalmente colgando, asumí que no sería una buena postura. Como chocolate no podía embocarla bién se bajó con casi toda su verga afuera de su capullo lo que yo aproveché de acariciarsela y pajearlo muy suavemente, el perro jadeaba muy agitado y me tenía todo mi culo mojado ...