La matiné del viernes
Fecha: 24/03/2019,
Categorías:
Masturbación
Sexo con Maduras
Voyerismo
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
Ese viernes por la tarde salí del trabajo más temprano de lo acostumbrado. Mi esposo ya me había avisado que regresaría muy tarde esa noche y, como ya tenía de antemano preparado todo lo necesario para la cena, decidí ir a un cine cercano donde proyectaban una película que hacía rato me interesaba ver…Mientras retiraba mi entrada, me di cuenta que la película ya había comenzado un par de minutos antes. Me adentré a los tumbos en la oscuridad de la sala, ya que, encandilada por la luz exterior mis ojos no se acostumbraban a ese lugar tan negro como una boca de lobo.Para no entorpecer a otras personas, me senté en la primera butaca que conseguí ver que estaba vacía.Poco a poco mis ojos se fueron acostumbrando a la oscuridad y entonces pude notar que solamente éramos tres los espectadores en esa función. Los otros dos eran una pareja que justamente estaba sentada en la fila anterior a la mía; a la misma altura de mi asiento.Estuve a punto de levantarme y buscar otra butaca, pero ya me había acomodado y me dio un poco de vergüenza que me vieran alejarme de ellos como si fueran leprosos.Durante la primera media hora ni recordé que esa pareja estaba ahí.Me encontraba muy concentrada en la acción de la película, que trataba sobre una complicada relación debido a una situación de intercambio de parejas y sus consecuencias.De repente me encontré presenciando una alta carga sexual en la pantalla.Ante mi sorpresa, detecté que la butaca de la mujer sentada adelante comenzaba a moverse ...
... con un ligero vaivén. Mi imaginación estaba en aquel momento muy calenturienta por efecto de la película, pero mi vista no me estaba engañando.La mujer estaba incrementando de a poco su movimiento acompasado y vi el brazo de él que se movía hacia ella.En una primera reacción, pensé de nuevo en alejarme de ellos; pero algo en mi interior me lo impidió; de repente sentí que mi entrepierna se humedecía mientras trataba de observar qué estaba sucediendo en esa fila delantera. Fui abandonando mi interés por la película y mis sentidos se centraron en mis vecinos espectadores…Por lo que pude llegar a ver, ambos estarían rondando los treinta años.El hombre parecía ser bastante fornido, con anchas espaldas y brazos musculosos. La mujer era rubia, con sus largos cabellos recogidos en una cola de caballo.Asomándome discretamente por el hueco que dejaban las butacas, pude ver de forma clara que ella llevaba una falda corta con amplio vuelo y la mano de él se perdía entre sus piernas, las cuales se encontraban separadas en un ángulo de más de noventa grados.Los movimientos de la mano del hombre eran todavía suaves y discretos, al igual que los zigzagueos de cintura de ella; me sorprendió que no se miraran, seguían absortos por las imágenes eróticas del film y comprendí que estaban combinando la excitación producida por la película con la que ellos mismos se daban.En ese momento sospeché que quizás hubiese otro factor de excitación adicional: que alguien les estuviese observando. Yo estaba ...