Pueblo chico... Infierno grande II - Relatos Eróticos

Pueblo chico... Infierno grande II

... Pero mamá, son las 4 de la mañana, que pasa?? - Tu obedece y apresúrate!! Llévalo a la casa grande. Así lo hice, estaban todos en pie, Amalia en la cocina tomando café, era extraño, jamás tomaba sus famosos tecitos de la india... era adicta al café y la verga de don Benigno. El viejo por su parte estaba fuera de la habitación de su esposa que estaba dentro con el cura, ya hace casi un año que no compartían cama, la Sra. Isabel comenzó a estar cada vez más enferma, como si poco a poco fuese apagándose como la luz de una lámpara de aceite que se consume - Antonio, que pasa con mi mujer! - Lo siento hermano!.. Se ha ido! El viejo no emitió palabra alguna, bajo raudamente, tomo su caballo y se fue... Casualmente Amelia también desapareció diciendo que iba al centro a enviarle un telegrama a Mauricio y Gabriel para avisarles, le pidió a mi mamá y el padre Antonio que se hicieran cargo de todo. A pesar de mi pena seguí con mi rutina, pensando en la pena que sentiría mi pobre Gabriel al recibir la noticia, me dirigía camino a la lechería cuando vi el caballo de don Benigno amarrado a un árbol. - Viste como lo prometí, me encargaría de todo... Ahora eres solo para mí, mi Beni, mi macho. Ahora seré la nueva Sra. de Soto-Mayor - Párate ahí zorrita!, primero yo nunca te dije que serias mi señora, segundo yo no tengo dueña, yo soy el Amo acá y te lo voy a demostrar perrita!! Volteó a Amelia agarrándola del pelo y la apoyo sobre un árbol con una mano le apretaba sin la más mínima ...

... delicadeza una teta, y en la otra tomaba su falo erecto y lo disponía en la entrada del culo de ella. - Que haces??, no, no aun no estoy lista, me lastimas! - Cállate perra! tu no le llegas ni a los talones a tu hermana, ella era una dama, que conoció un solo hombre, a mí, solo yo poseí su cuerpo, solo yo probé su carne, no como tu puta de mierda quizá cuantas vergas te has tragado! - Comenzó a penetrarla analmente sin compasión, como descargando en ella toda la rabia contenida, Amelia gritaba por el dolor ocasionado, y le suplicaba que parara, pero él no paraba la penetraba una y otra vez hasta el fondo, las astillas del árbol le rozaban el pezón, yo observaba con algo de goce ya que la maldita asesina de mi querida señora Isabel no sabía en lo que se había metido y desde ahora comenzaría a pagar su pecado. - Quieres ser la señora Soto-Mayor he perra?? Entonces obedece, ahora voltéate y ponte a chupar! - Pero estuviste en mi culo, eso es antigénico! - la bofetada que recibió la tumbó al suelo - Te dije que mamaras puta de mierda!!, de hoy en adelante comenzarás a usar la ropa de Isabel, se acabaron esos trapos de puta que usas, y que te encuentre meneando el rabo fuera de la casa, porque te va a pesar. - Eres un Maldito!! ahora hablas de que mi hermana era una dama y de que solo se entregó a ti, tu sabes que ella era la novia de Antonio, y tu abusaste de ella y la embarazaste, y amenazaste a mi padre con quitarle todo, y como el pobre viejo ya está alcoholizado, no le quedo de otra ...