Mi esposa Juanita y su exjefe (parte II)
Fecha: 19/02/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: brandonloredo, Fuente: CuentoRelatos
... gustaba mucho, y se estaba preparando para la próxima vez, con el gimnasio, pensaba volverlo loco de placer. Empezamos a salir los sábados por la noche a un café bohemio donde se presentaban cantantes y cosas así, yo la animaba para que tomara y se pusiera más dispuesta a hacer locuras. Esa noche nos fuimos a un hotel y pedimos la misma habitación donde se la había cogido Humberto y me describió la escena con detalles. Cogimos como nunca ella pensando en Él y yo imaginando la escena. Hasta que un día de enero se llegó la fecha, y ella se vistió para El, más coqueta que la primera vez, había estado comprando lencería erótica verdaderamente lujuriosa. Con un vestido rojo entalladísimo y corto que dejaba ver sus piernas torneadas y blancas como una alucinación, y su culo parado que se antojaba darle una palmada. Debajo medias negras con liguero, y una tanga pequeñísima negra también, sostén del mismo color. -Cómo estoy? Me dijo cuándo se presentó en mi oficina. -Wow le dije yo, estas preciosa -A dónde vas, si no es indiscreción? -Ya sabes me dijo, voy con Humberto al rato regreso. -Disfrútalo mucho y por favor saca unas fotos quiero ver como la tiene. -Ok te lo prometo, me dijo sonriendo. Y se fue, yo me quede otra vez con esa extraña sensación de celos y excitación, pero lo que si sabía es que cuando me contara lo sucedido iba a tener mi recompensa. Pasaron las horas y ella llego a casa, venia algo desarreglada, señal de la batalla sostenida con su macho vergudo. Yo ya estaba ...
... metido en la cama cuando ella llego, y le dije vente para que me cuentes y mientras se desvestía me dijo –Vengo hasta acá de verga. –Ahora te cuento. Y se metió a la cama conmigo me abrazo y me beso, y me dijo ahí te va. -Pues me hablo Humberto que me esperaba en el motel Paraíso y me dio el número del cuarto, y fui hasta ahí en la camioneta y toque y abrió el, no lo podía creer se le veía en los ojos. -Me abrazo con ansiedad y me junto a su cuerpo mientras sus manos bajaban ansiosas a mis nalgas, de inmediato sentí como le crecía su enorme bulto, el que yo tanto deseaba. -Esta vez estaba más caliente que la primera vez, porque me decía cositas ricas como -mi amor te extrañe tanto, te quiero coger, estas deliciosa, que te hiciste que estás bien buena, y todas esas cosas que solo él sabe decirme y encenderme. -Cuando me quite el vestido frente a él, y miro mi lencería casi se le cae la baba, y a propósito modele un poco, poniéndome en poses, mientras que él se quitaba la ropa también, quedando sin nada, al aire tremenda verga bien erecta, y sus huevos tan grandes, que yo también me quede extasiada. -Nos fundimos en besos y abrazos, manos por donde quiera, este era un encuentro de apología, mejor que un video porno. -No hizo ningún intento de quitarme la lencería, yo creo que le excitaba más así, estaba como burro con una inmensa erección que su verga pegaba a su abdomen, subiendo y bajando presa de los espasmos que las ganas le ocasionaban. -Él se la agarraba subiendo y bajando ...