1. Gracias a mi jefe…


    Fecha: 24/04/2024, Categorías: Dominación / BDSM, Gays Transexuales Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30

    ... mi casa, y al preguntarme cómo me había sentido, le dije. “Extremadamente bien, pero que como vivo con mis padres y hermanos tan solo lo he podido hacer una sola vez.”
    
    Después de escucharme, se le ocurrió decirme. “Sabes donde vivo.”, a lo que le respondí que sí, y él continuó diciéndome. “Mañana te espero en casa, después de las seis de la tarde. Vamos a ver cómo podemos ayudarte”. Yo me quedé sorprendido, y dándole las gracias me retiré.
    
    Al día siguiente a las seis en punto toqué la puerta de su casa, apenas llegué me dijo. “Mi exmujer dejó gran parte de su ropa antes de marcharse. Con toda confianza si gustas darte un baño entra a esa habitación, y en toda confianza hazlo, además puedes ponerte todo aquello que tú desees, yo mientras tanto voy a ir a visitar a unas amistades, y luego regreso dentro de un par de horas”.
    
    Cuando mi jefe regresó, como casi tres horas más tarde, con unos cuantos tragos encima, seguramente ni se acordaba de que yo estaría esperándole en su casa.
    
    Por lo que cuando después de abrir la puerta me encontró de frente esperándolo en su sala, por la cara que puso, ni idea tenía de quien yo era.
    
    No fue hasta que le pregunté ¿jefe cómo me veo? Fue que de seguro se vino a dar cuenta de quien yo era.
    
    De inmediato, tomó asiento y se me quedó observando detenidamente, me pidió que diera unos cuantos pasos, lo que comencé a hacer de manera algo torpe, por mi pobre dominio del uso de zapatos de tacones.
    
    Mi abundante cabellera castaña, el ...
    ... maquillaje que estaba usando, apenas dando algo de color a mis labios.
    
    Por lo que de momento él, decidió que brindásemos por todo el trabajo que yo había realizado, y aprovecho para preguntarle cómo me gustaría que me llamasen, cuando estuviera así de lindo, y de inmediato le dije, Linda.
    
    Cuando él regresó con dos vasos de Uisquí en las rocas, bien llenos, le confesé a mi jefe, que en mi vida había tomado nada de alcohol, ya que mis padres eran de la religión evangélica, y nunca en mi casa había habido bebidas alcohólicas.
    
    De inmediato mi jefe me dijo. “No te preocupes Linda, esto es nada más para refrescarnos un poco”. Después de darnos el primer trago, comencé a decirle lo bien que me sentía vestida de mujer, mientras que él continué alagándome y diciéndome lo hermosa que me veía así vestida.
    
    Al principio, mi jefe se había sentado en una de las butacas de su sala, mientras que yo me había sentado en el sofá, cruzando mis piernas, de manera bien femenina.
    
    Al terminar el primer trago, sin preguntármelo, él se levantó a servirme el segundo, pero al sentarse lo hizo a mi lado.
    
    Yo seguí comportándome como si fuera toda una chica, riéndose de algunas de las cosas que mi jefe me decía, a medida que él se acercaba más a mí.
    
    En cierto momento me preguntó. “¿Qué crees que te haga falta para sentirte más mujer?” Yo me quedé en silencio sin saber que responder, mientras me daba otro trago.
    
    Mi jefe, colocó una de sus manos tras mi nuca y apenas retiré el vaso de ...